Román Muñoz, gerente de Aseacam, ha participado en la reunión con el alcalde D. José Luis Martínez Almeida en CEIM, donde se le han podido plantear los problemas que tiene la industria alimentaria para repartir alimentos en el centro. El alcalde se ha mostrado receptivo y sensato, comprometiéndose a estudiar las propuestas.
Noticia publicada en «La Razón» 31/10/2019
El Ayuntamiento de Madrid estudia una moratoria a la restricción al acceso a Madrid Central desde el 1 de enero a los vehículos de distribución de mercancías de menos de 3.500 kilos sin distintivo ambiental, según anunció ayer el alcalde, José Luis Martínez-Almeida.
El presidente de CEIM, Miguel Garrido, trasladó al alcalde y al delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, su preocupación por la entrada en vigor de la zona restringida. «Vamos a asumir propuestas que se nos hagan que sean razonables y vayan en esa línea de compromiso con el medio ambiente y con la calidad del aire pero también garantizando una movilidad sostenible y un centro de la ciudad vivo», declaró Almeida.
El alcalde también anunció que el Ayuntamiento lanzará «de forma inmediata» una línea de subvenciones para la renovación de estas flotas comerciales. «Nos dicen los hosteleros y los empresarios de los supermercados que pueden tener un problema grave de abastecimiento en Centro por las características de los camiones de carga y descarga con menos de 3.500 kilos», expuso.
Los empresarios le trasladaron a Almeida que no pueden renovar las flotas, muchas de ellas en manos de autónomos, «por una cuestión de plazos y de suficiencia económica». Por eso, y «para garantizar el abastecimiento», el Ayuntamiento estudia una prórroga de las restricciones previstas desde el 1 de enero y lanzará esa línea de subvenciones. «Si se habla de prohibiciones también hay que hablar de incentivos, si pedimos un esfuerzo a los ciudadanos les tenemos que ayudar en ese esfuerzo», continuó el regidor.
Otras de las propuestas que CEIM les trasladó, indicadas por Almeida, son la necesidad de «unificar ese conjunto de excepciones que ha hecho que la regulación de Madrid Central sea un queso gruyère de difícil comprensión porque se dictó un decreto sobre el que se han dictado más de quince instrucciones».
También destacó sobre la distribución de mercancías la posibilidad de «minihubs logísticos que puedan facilitar la última milla» y un sistema inteligente para la flota de carga y descarga, informa Europa Press.